Las calles de Toledo encierran magníficos misterios. Los relatos son mejores de los que podemos encontrar en películas de terror y convierten a la ciudad en un museo abierto a cualquier hora del día.

Toledo es una ciudad que tiene gran cantidad de iglesias, conventos y ermitas donde cientos de personas entregan su alma a un recogimiento espiritual desde tiempos inmemoriales.

Lo anecdótico es que también, esta ciudad extremadamente religiosa es considerada cuna de la magia, superstición y hechicería hasta el día de hoy. Apoyan estas creencias el hecho que no exista en Toledo una sola iglesia que no albergue en su interior una imagen milagrosa, es decir, que haya curado a alguien o haya estado envuelta en algún caso fuera de lo común.

Las leyendas toledanas están cargadas de hechiceras, pócimas para el amor, pactos con el diablo, objetos milagrosos, etc. Las artes mágicas tuvieron influencia judáica y musulmana y desde hace muchos siglos se les conoce como ciencias toledanas o artes toledanas debido a la importancia que esa ciudad le daba a la magia. La Escuela de Traductores de Toledo fue la encargada de propagar por toda Europa el culto que Toledo le rendía a los poderes ocultos.

Todas las formas de hechicería eran utilizadas en Toledo. Tenemos por ejemplo: la “suerte de habas” que consistía en pronunciar una oración en voz alta con dos habas metidas en la boca. También eran utilizadas las pócimas con hierbas, los naipes, los conjuros mágicos, etc. En aquellas épocas todas las hechiceras eran conocidas en la ciudad, pues los vecinos utilizaban su arte para fines personales.

El Tribunal toledano de la inquisición tenía cuarenta y cinco años de funcionamiento y no había procesado a ninguna persona acusada de hechicería. En 1530 Leonor Barganza fue la desafortunada en ir a comparecer ante el tribunal. El que todos dijeran que era bruja, las diferencias con sus vecinos y las envidias fueron los detonantes para que sufriera el arresto.

También encontramos leyendas como la del “Callejón del Infierno” donde un apuesto joven compra las artes de una bruja y así apartar a su amada de otro pretendiente. Un callejón fue el escenario para concretar los servicios de la bruja. Al momento del pago el alma de ella es arrastrada por el diablo y de allí el nombre del callejón. Otro relato es de “La Fuente Misteriosa” es una historia que surge durante la guerra de independencia sobre la fuente que se encuentra en el Paseo de la Rosa. Cuenta la historia que de la fuente sale un cántico de los guerrilleros migueleños.

Ciertas o no, la verdad es que las leyendas y misterios suelen ser parte de la vida de las ciudades legendarias como Toledo.